martes, 11 de junio de 2019

Cuando la calor ya pinta





                   Escribimos con cordura,
                   con entusiasmo y con valor,
                   de la vida y desventura,
                   en blanco y negro y en color.

                   Os contamos realidades,
                   sueños, ficciones y cuentos,
                   las mentiras y verdades,
                   las metáforas a cientos.

                   Descansamos en verano
                   cuando la calor ya pinta.
                   Regresaremos temprano,
                   para que suene la tinta.


Rabo de lagartija

Soñar





Creería soñar como una niebla que avanza eterna.
Reclamaría  susurros de felicidad,
una justicia hechicera derramada cual maná empapando al mundo.
 La igualdad de un universo humano, bondadoso,
que nos  hermana en la vida como lo hace el nacer o el morir.
Si no recordara sería un vegetal. Un ente sin dolor ni sufrimiento.
Un ser sin alegría  ni amor.
“Injusticia”
 La injusticia individual y colectiva.
 tan desastrada y pordiosera.
 ¡Tan vencida la justicia!
 Tan hondamente anegada  en los bajos fondos del abismo social.
La muralla que los atlantes del oro levantan, la dejan invisible.
 ¡Derrumbemos  las murallas!
Como la trompeta del arcángel apocalíptico hizo con las de Jericó.
Exijamos la espiral de un mundo justo y bondadoso
Anunciando su presencia y liberándonos.
Feliz verano os deseamos a todos.


 Quirón

Me voy cuando tú llegas




         Me iré cuando tú vengas, le dice la primavera al verano que se aproxima mientras mira a su alrededor.

         Durante el tiempo que había durado su reinado  había contribuido a vestir de verde los campos. También había visto crecer las semillas de la siembra y entre ellas florecer las amapolas y margaritas. Los árboles frutales cubrirse de flores para después convertirse en fruto. Los pájaros hacer los nidos donde depositarían los huevecillos de donde saldrían los nuevos polluelos.  Las especies que durante el invierno habían invernado salían de su letargo para comenzar un nuevo ciclo.

         La primavera iba recogiendo los instrumentos que había utilizado y los fue guardando con cuidado en un saco sin fondo de donde los sacaría cuando llegara de nuevo su tiempo.

         Antes de partir miró de nuevo los campos. Los trigales habían cambiado el ver con el dorado lo que indicaba que pronto estarían maduras las espigas y comenzar la siega para recoger el trigo. Los sarmientos de los viñedos se habían cubierto de verdes hojas para dar cobijo a los nuevos racimos de uvas. También los  árboles frutales ofreciendo ya sus frutos. Durante su recorrido no dejaba de escuchar el cántico de los pájaros al abandonar el nido para emprender el vuelo.

         Cuando el verano llegó para tomar el relevo, la primavera le entregó el legado que le había entregado el invierno y deslizando su manto sobre las flores amarillas de las florecidas retamas se alejó dejando tras de sí una estela que marcaría de nuevo su regreso.


I R I S

Fin de curso





Todo se acaba para comenzar de nuevo.

Durante el invierno que es un tiempo oscuro y frío da paso a la primavera llena de luz y color.

Después del invierno siempre llega la primavera.

Después de una noche cerrada y llena de sueños  llega el amanecer espléndido y la mañana con su realidad y un día de gran actividad.

Después de un duro día de trabajo tienes la recompensa de llegar a casa y poder quitarte los zapatos.

Después de un enfado siempre llega la reconciliación.

Después de estar con mis compañeros un curso entero, ahora llega a su fin, necesitamos un descanso aunque seguiremos atentos a lo que pasa a nuestro alrededor para luego poder contarlo.
Me  habéis hecho sentir una más del grupo, hemos compartido opiniones políticas, confidencias, sentimientos y algún que otro café.

Gracias gente.


Clave de Sol

Fin de curso 2018/2019





                   Nos vamos de vacaciones,
                   después de aprobar el curso,
                   después de las elecciones,
                   después de tanto discurso.

                   En España y en la Escuela,
                   Sánchez maneja el timón,
                   uno vive en la Moncloa,
                   otro vive en su rincón.

                   Uno es fino y presumido,
                   el otro es llano y sincero,
                   trabajador y sensato,
                   amigo y gran compañero.

                   Porque este grupo de letras,
                   que nos vemos cada día,
                   hablamos de nuestra oferta,
                   con rabia y melancolía.

                   Nos vamos hasta septiembre,
                   y disfrutar del verano,
                   que la sesera no tiemble,
                   y con el boli en la mano.


Trotamundos

sábado, 1 de junio de 2019

El banco de la avenida





         Marcelo solía sentarse en un banco de la avenida cercana a su casa. Un enorme platanero proyectaba una sombra sin fisuras que hacía agradable la estancia en él. Desde allí contemplaba el devenir de las gentes del pueblo.

         Solía sentarse a su lado un viejecillo que no se cansaba de contarle lo que había hecho de joven, lo que había conseguido como autónomo y los caudales que había despilfarrado hasta su jubilación. Marcelo sabía que había cotizado a la Seguridad Social lo mínimo y ahora cobraba una pensión escasa. Las añoranzas del pasado eran su mayor alegría de vivir.

         Por allí pasaban toda clase de gentes. El banco estaba al lado de un paso de peatones que llevaba directamente a un gran parque que el ayuntamiento había construido en sus mejores épocas económicas. Personas con perros, jubilados que ocupaban los bancos a la sombra y se contaban mil batallas. Padres y madres con niños que jugaban en las áreas de columpios y toboganes. También tenía el parque un circuito para hacer ejercicios de correr, así como una zona de elementos gimnásticos donde jóvenes ponían sus músculos en forma mientras las chicas los admiraban.

         Justo enfrente del banco había una zona donde las rosas de todos los colores competían por ser las más hermosas. El parque tenía un estanque en el centro donde anidaban patos y se podían ver tortugas que la gente se cansaba de tener en casa y las llevaba allí. La vida transcurría dentro del parque.

         Marcelo, a una hora preestablecida, se daba una vuelta por el parque y se marchaba a su casa contento de observar que la vida transcurría plácidamente a su alrededor. Todos los días hacía la misma rutina que le ayudaba a no sentirse sólo. Qué sería de nosotros sin no existieran los parques.

Rabo de lagartija

Cuando conocí el odio





Al odio lo conocí un martes a primera hora de la mañana, metido en un cuerpo  mirándome con ojos acusadores y el dedo índice apuntándome amenazante.

Hasta entonces había vivido rodeada de amor, amistad, alegría y buenas sensaciones.

Cuando te topas con el odio, así de esta manera, te quedas tocada y pensando.  Piensas que esa persona quiere controlar todo, que tiene mal encare, mal mirar, amargura, mucha amargura y tanto odio dentro que le sale por los ojos acusadores y por el dedo índice amenazador, un querer siempre fastidiar la fiesta, en realidad son personas toxicas y realmente no es recomendable tenerlas cerca porque además me roban mi energía positiva que llevo dentro.

Después de haber conocido el odio me vuelvo a mi mundo lleno de amor y positivismo, amistad y saber disfrutar de las pequeñas cosas.

Cada cual en su mundo, intentaré que el mío este muy lejos del suyo, aunque el odio me quiera contaminar.

No lo permitiré.


Clave de Sol

Europa, una política que no haga daño





Si se caen las casas y se caen los poemas, estamos perdidos. Y también si
se cae Europa, un incordio para las fuerzas rampantes de la descivilización.
En las elecciones europeas, hasta ahora, ha habido más abstención que en
ninguna otra. En  general, en todos los países de la desunida Unión.
Pues debería ser al revés. Las que convocasen a más gente. Por un simple
cálculo de las estructuras. Para que no se nos caiga la casa.
Pera que no nos las tiren. Porque hay toda una trama para destartalarla.
Es verdad que la actual Unión es muy imperfecta. A veces da náuseas.
Cuando el Parlamento, desposeído de poder real, parece una entidad
desplazada a la Heliopausa. Cuando quién determina la política social, lo que
de verdad puede cohesionar a Europa es un eje financiero que funcionara a
la manera de Mark Twain a los bancos: te prestan paraguas en verano
y te los quitan si llueve a cantaros.
Cuando la conjunción de los lobbies del “nuevo” liberalismo y las élites
del “viejo” estatismo deciden a sus anchas e ignoran a la ciudadanía.
Cuando en los discursos se halaga a la sociedad civil, pero tocan a rebato
Si esa sociedad se activa y lucha contra la sustracción de derechos.
La Unión Europea es muy imperfecta, pero, con todo, es un incordio.
Molesta la Unión. Y mucho más molesta la posibilidad de más unión.
Que se consolide una ciudadanía europea. Quienes quieren desmantelarla,
desde fuera y desde dentro, saben que la identidad de la Unión responde a una
morriña, a una añoranza del porvenir: no hacerse más daño.
Después te tantas guerras, después de tantos incendios humanos,
 había que construir una casa común. Y  para esa tarea era imprescindible
el cálculo de estructuras. Es la base de la arquitectura y también de la poesía.
Para que no se caigan las casas, para que no se caigan los poemas. Eso quien
lo explica de maravilla es el gran Joan Margarit  catedrático.
 Si se caen las casas Y se caen los poemas, estamos perdidos.
Y también si se cae Europa. Hay mucha gente desencantada con la política,
Tal vez porque tenía de ella una visión providencial.
Yo no estoy desencantada, ni encantada, porque no espero milagros.
Me parece suficiente milagro una política que no haga daño.
Aunque imperfecta que no cause desperfectos.
 Que no penalice la libertad, que no normalice la injusticia, que frene la
guerra contra la naturaleza.
Una política que no se nos caiga encima.


Quirón  

El candidato





            Se aproximaba el día señalado. Había sido presentado por la familia para optar a su candidatura como aspirante al objeto de la convocatoria.

         Durante semanas había estado trabajando en lo que sería su programa de intenciones  y conseguir el objetivo que se había marcado.

         Por fin llegó el día señalado para su presentación. Se había levantado muy temprano. Apenas había podido  dormir aquella noche pensando lo que le esperaba al día siguiente.

         Después de  tomar un desayuno ligero salió de casa con dirección al lugar donde tendría lugar su posible elección. Le acompañaban parte de su familia que no querían perderse el acontecimiento.

         Cuando llegó hasta las proximidades de la  casa donde se celebraba el    acto, pudo ver a los que como él esperaban entrar en su interior  para conseguir su elección.

         Mientras esperaba su turno, podía ver como se abrían las puertas para dejar pasar a los aspirantes.

         Uno a uno iba entrando para salir minutos después y esperar en el exterior el resultado de su presentación.

         Cuando llegó su turno entro en la casa. En su interior se encontraba la joven acompañada por su familia, recibiendo a los candidatos que se presentaban a pedir la mano de la hija del dueño de la casa.

         El recién llegado, tras exponer su programa ante la familia, salió al exterior a esperar la decisión que podría conducirle a ser elegida su candidatura y de optar a la mano de la joven y derrotar a los que como él esperaban  ser elegidos y ganar  su candidatura.


I R I S 

Elecciones





                Ya ha pasado la tormenta
                ahora nos espera el fruto,
                luego echaremos la cuenta
                ya por listo ya por bruto.

                Hemos tenido elecciones
                hasta tomarnos la sopa,
                desde todos los rincones
                por España y por Europa.

                Todo ha sido prometer
                ya veremos si se cumple,
                ahora toca componer
                la sardina está en la lumbre.

                Y… me temo que será
                altamente peligroso,
                manejar una cartera
                es un puesto muy goloso.

                Todos quieren lo mejor
                pero no lo valen todos,
                el trabajo y la honradez
                requiere hincar los codos.

                Nos han hecho mil promesas
                por el ansia de ganar,
                esas que quedan impresas
                y que no podrán borrar.

                Lo tendremos bien en cuenta
                que el que avisa no es traidor,
                y estaremos siempre alerta
                Diputado y Senador.


Trotamundos