Oír el murmullo del mar, ver un eclipse de sol, ver la
luna llena, oír el viento entre las ramas de un árbol son cosas que nos brinda
la naturaleza gratuitamente.
Nicolás vive en una casa casi destruida por el tiempo,
tiempo que a él le gusta dedicar a mirar
la naturaleza y observar cómo cambia todo el paisaje que su vista abarca.
El paisaje cambia en horas en semanas y en años.
Nosotros
medimos el tiempo, Nicolás vive su tiempo.
A Nicolás le gusta mirar la parra que tiene al lado de
su puerta, se construyó (hace ya mucho tiempo) un banquito para poder admirar
su parra que le da sombra en verano y unas uvas dulces y gordas cuando empieza
a refrescar.
Nicolás lleva una vida sin relojes, mira el cielo y
sabe lo que debe hacer o lo que quiere
hacer. Vive solo y no le pesa su soledad, ha ido adaptándose a su vida,
ahora sabe que ésta es su vida.
Para la gente de la ciudad una hora más apenas es
vivida pero para Nicolás es un regalo para poder observar la naturaleza que le
rodea y disfruta una hora más.
Desde su banquito ve pasar las sombras frente a su
casa, ve el atardecer, espectáculo único
y cuando llega la noche tiene la sensación de que ha vivido esa hora
regalada con mucha intensidad.
Clave
de Sol
No hay comentarios:
Publicar un comentario