sábado, 3 de marzo de 2018

Crónica de un día triste





Forges ha muerto en Madrid a los 76 años
 La mejor dimensión de su figura es, qué era, cómo dibujaba. Para mí, se lo ha llevado ese llamémosle “virus”, llamado cáncer, que tan común nos es en estos tiempos tan cubiertos de otros “virus” que se contagian a todos y cada uno, según sus vivencias.
 Los dibujantes tan sensibles como él a las muy espurias miserias con que nos asaltan los políticos de turno a los ciudadanos como: corrupciones, choriceos, leyes  “tapabocas”, leyes de “trabajadores” que nos pone a todas/os a pasar hambre…
Para aguantar esas presiones sobre su fino espíritu de hombre libre, y seguir sonriendo como lo hacia él, después de tantos años, tenía que tener esa pequeña lesión que se produce el alma cuando sabes que siempre te engañan, que te mienten descaradamente, y él se defendía  y nos defendía con sus dibujos a veces tan esperpénticos, a veces tan sanos, a veces tan sentimentales… ¿Pero fue suficiente? Forges llevaba 50 años  haciendo de sus muchos miles de viñetas, el día a día de este País imposible, incluidos aquellos primeros, cuando siendo casi un niño, le tocó forjarse en los años del dictador. Porque seguro fueron para Forges una gran prueba, de las que el autor saldría curtido y victorioso. Dispuesto a imprimir mucho de su forma de ser y pensar: simpático, amable y  sugestivo Forges.
 Era un reflejo fino de la sociedad incongruente española, la que se refleja en  Él. Yo que le seguía, notaba esa empatía suya tan amable como entrañable y si le escuchaba hablar, eso me lo confirmaba. Pero ayer y hoy  las gentes que  le conocían y le querían me lo han confirmado.
 Tienes que tener una gran capacidad, de echar balones fuera. Fuera tanta maledicencia, tanta indignidad. No puedes digerir tanta basura sin enfermar. Forges que nos regaló tanto con aquella visión de la vida en sus viñetas, se nos ha ido demasiado pronto. Con él ha muerto uno de nuestros mejores ciudadanos.  
Tan acostumbrados estábamos a él que será inevitable que le echemos de menos.
                                                                                                       QUIRÓN

No hay comentarios:

Publicar un comentario